La lucha contra los microbasurales ha puesto a la comuna de Hualqui en una encrucijada crítica. Los microbasurales son un flagelo que empaña la belleza de esta encantadora comunidad, donde la naturaleza y la vida cotidiana conviven en armonía, y por cierto una gran amenaza para la salud de sus vecinos. Sin embargo, si abordamos la tarea de manera integral y resuelta, este problema no es insuperable. En primer lugar, es fundamental asignar fondos para la creación de lugares de recolección suficientes y modernos, que faciliten la capacidad de los ciudadanos para eliminar sus desechos de una manera conveniente y segura. Fomentamos un comportamiento más consciente y reducimos la cantidad de residuos que acaban en microvertederos mediante la implantación de un sistema de recogida selectiva y reciclaje.
También es crucial trabajar en conjunto con organizaciones de la comuna, como la Corporación de Desarrollo República Sostenible, que ha facilitado campañas de acción, intervención y diversas propuestas. Su iniciativa "Hualqui Libre de Microbasurales al 2025" presenta una estrategia práctica y de largo plazo para erradicar esta gran problemática de nuestra comuna. Los pilares de esta campaña son las iniciativas de educación y sensibilización ambiental. Es necesario concienciar más al público sobre los efectos negativos que tienen los microresiduos en el medio ambiente, la salud humana y la estética.
A su vez, debemos llamar la atención sobre los riesgos que plantean los microbasurales para los incendios y la propagación de enfermedades. No se pueden subestimar los efectos perjudiciales que los microbasurales tienen sobre el potencial turístico de Hualqui. Eliminar estas fuentes de contaminación es crucial para proteger y mejorar nuestras riquezas naturales y culturales, ya que disuaden a los turistas que buscan experiencias naturales y seguras.
Podemos superar esta crisis planteada por los microbasurales y crear un futuro más limpio y sostenible para Hualqui y sus habitantes. Sin embargo, es crucial reconocer que este no es un problema que se pueda abordar puramente desde la recolección, como si el problema fuera simplemente la falta de camiones recolectores. Debemos impulsar un cambio de paradigma, generar conciencia y promover una cultura de autocuidado integral en nuestra comunidad. Es importante entender que estamos dando los primeros pasos hacia una economía circular, donde se fomenta la reutilización, la reparación y el reciclaje de productos y materiales para reducir la generación de residuos y maximizar el valor de los recursos. Este enfoque nos permitirá no solo resolver el problema de los microbasurales, sino también construir un futuro más próspero y sostenible para todos.
Opinión
Abner Castillo
Director Centro Familiar Tu Tiempo